El comienzo de la vitivinicultura

Si consideramos la elaboración del vino como una actividad humana planificada, tuvo su origen durante el Neolítico, entre los años 8.000 a.C. y 6.000 a.C, en una zona vecina a los mares Negro y Caspio.

 La primera referencia escrita del vino en la vida de los hombres es la epopeya de Gilgamesh, escrita en sumerio en tablas de arcilla, hacia el 2000 a.C.

En el antiguo testamento de la Biblia, se relata que cuando el arca de Noé quedó anclada en el Monte Ararat, Noé plantó una vid.

Del nuevo testamento se destaca la celebración de las bodas de Caná y la última cena con la simbología del vino en ella.

El consumo moderado de vino no es cosa de ahora

En la cultura griega, el médico Hipócrates proponía “Que tu alimento sea tu medicina y sobre el vino decía El vino es una cosa maravillosamente apropiada para el hombre si tanto en la salud como en la enfermedad, se administra con tino y justa medida

En nuestro país, Uruguay, el inicio de la vitivinicultura tuvo lugar cuando los inmigrantes la introdujeron al país hace poco más de 250 años. Un mayor desarrollo se logró a partir de 1870 cuando Don Pascual Harriague introdujo desde Francia la cepa Tannat.

En las últimas décadas, el vino tinto Tannat se ha convertido en el varietal emblemático del Uruguay.